No todo está dicho en banca móvil, aunque el camino a la digitalización es uno recorrido desde hace años. Si antes la máxima demanda de los usuarios estaba representada por los pagos en tiempo real, ahora exigen verdaderos motores con múltiples servicios y productos integrados en una misma plataforma.
La billetera digital colombiana Nequi, Mastercard y de la proveedora de tecnología FluxIT coincidieron en el evento “Banca digital: herramientas para los usuarios del futuro” organizado por iupana, y destacaron que la banca móvil hacia el 2024 debe fortalecer sus niveles de seguridad, considerar dispositivos para utilizar (wearables), afinar su experiencia de usuario y ofertar cada vez más productos financieros.
Más datos más seguridad
Soluciones como transferencias, consulta de saldos o pagos de servicios se han convertido en commodities básicos para las aplicaciones móviles financieras. Por ello, el reto es agregar valor a través de funcionalidades construidas sobre los datos compartidos por los usuarios.
Una buena captación y organización de datos da la oportunidad de generar productos financieros personalizado. No obstante, también trae consigo desafíos de protección de información para las empresas.
“Los temas de seguridad se vuelven supremamente relevantes en el 2024”, anotó María del Pilar Correa, jefa de estrategia de negocio de Nequi.
“Con este boom digital las personas le han entregado su confianza a muchas apps para hacer muchas cosas que antes no hacían de forma digital, pero por la entrega de esa confianza también esperan seguridad, que se cuiden sus datos, que cuiden su dinero”, agregó.
Nequi es una de las billeteras digitales más populares de América Latina. Fue encubada por Bancolombia y cuenta con más de 16 millones de usuarios, como contamos recientemente en una entrevista exclusiva con su CEO, Andrés Vásquez.
Una app personalizada
Junto con la seguridad, otro aspecto a considerar es el proceso de diseño a nivel de programación e interfaz. El reto en esta etapa es hacer aplicaciones financieras intuitivas para todas las edades.
El segmento más joven, más familiarizado con la navegación tecnológica, representa un cambio de esquemas para los bancos, que aún traen la etiqueta de tradicionales.
“Estamos frente a un cambio de paradigma: frente a una nueva generación que la podríamos llamar la ‘generación app’”, dijo Lucrecia Feller, líder de experiencia de usuario de Flux IT.
Agregó que el diseño de toda solución debe pensarse primero desde el móvil, es decir, considerar el dispositivo como el medio principal para acercarse a los potenciales usuarios, además de contemplar otros canales que van ganando espacio de preferencia entre los clientes.
“Me parece que los wearables, como los relojes, empiezan a tener un mayor dominio y son parte de del día a día de las personas. Hay que empezar a considerarlos”, dijo.
“Las tecnologías inmersivas todavía también está un poco atrasadas, pero son oportunidades. No siempre tenemos que pensar en transaccional, también podemos empezar a pensar en la deuda vinculada a la educación financiera y empezar a usar estos espacios y estas nuevas tecnologías para acercar otro tipo de contenido”, agregó.
Los voceros coincidieron en que poner al cliente al centro de cualquier solución o producto es fundamental para desarrollar una aplicación de valor. Ante esto, resulta clave cambiar las metodologías de investigación para adelantarse a las necesidades de los clientes.
“Es importante que el equipo esté enfocado siempre en atender al cliente, independientemente de la metodología que trabaje por detrás”, complementó Jesús Zúñiga, gerente de desarrollo de mercado de Mastercard Perú.
Agilidad y quitar miedos
Correa de Nequi enfatizó en que emplear metodologías ágiles ayuda a ser más eficientes y flexibles a una empresa.
“El agilismo está desde que nacimos, lo hemos integrado mucho, lo hemos escalado porque cuando tú creces también como organización, tienes que escalar las formas de trabajo”, dijo. Añade que, al estar próximos a los 17 millones de clientes, urge tener dinamismo para acercarse y oír a los usuarios.
Por su parte, Zúñiga de Mastercard mencionó que el agilismo, permite identificar los productos que se necesitan ofertar, aunque reconoce que el contexto económico influye en que los usuarios tengan temor por adoptar nuevos productos.
“Debemos ser empáticos con nuestros clientes”, a la hora de agregar productos y crear plataformas, destacó el ejecutivo. “Hay que entender mucho en la situación económica, política, social en la que nos encontramos hoy en la región […] hay productos que van asociados con la inclusión financiera, de manera que ese consumidor asustado pueda incluirse dentro de la banca tradicional”, sentenció.