Ante la sequía de capital, las fintechs han optado con mayor velocidad a otras formas de financiamiento, como deuda y líneas de crédito, según un reporte de la firma de capital privado Glisco Partners y Endeavor, una consultora para emprendedores e inversionistas.
Durante el primer trimestre de 2023, el financiamiento a través de deuda representó el 45% de las inversiones colocadas en la región. Esto equivale a US$ 344 millones del total de US$ 750 millones, que también suman las inversiones en capital de riesgo y para etapa de crecimiento.
Las cifras revelan la creciente importancia de estos instrumentos, en medio de un periodo caracterizado por políticas económicas contractivas que buscan detener la inflación a nivel global, graficadas en el aumento de las tasas de interés.
Este panorama gris ha generado reservas en las empresas de inversión. El primer trimestre registró la menor inyección de recursos en capital inicial y growth de los últimos cinco años en LatAm. El informe enumera una inyección de US$ 406 millones, sustancialmente menor que los US$ 3.300 millones del mismo periodo del 2022.
Asimismo, resalta que el monto promedio de las rondas durante el 1T 2023 fue de US$ 5 millones y que el mayor capital se concentra en startups en etapas tempranas (seed y serie A), mientras que las empresas en fases tardías tienen una demanda de capital no satisfecha.
No obstante, el sector fintech continúa liderando el foco de la inversión en LatAm, aunque con una disminución de 52% frente al 4T 2022.