Aunque es discreto, recalcando que los desarrollos que exploran son confidenciales, Manuel Sacasa, líder del centro de innovación Bci Labs, menciona que algunas de las tendencias que han pasado por su mesa incluyen digital twins, avatares sintéticos o la sinergia entre el internet de las cosas (IoT) y la inteligencia artificial (IA).
Los laboratorios y fábricas de innovación se han convertido en una parte importante del negocio bancario. Ante el avance acelerado de las fintechs y big techs, que tienen estructuras organizativas y de diseño de producto ágiles, las entidades tradicionales han tercerizado en sus incubadoras el scouting de avances que puedan ser incorporadas en sus servicios.
Es una vía para moverse al ritmo del mercado, sin necesidad de perturbar las operaciones de las sedes centrales. En este sentido, Sacasa revela a iupana que en momentos han tenido hasta 200 tendencias bajo revisión. Algunas serán desechadas, mientras que otras serán incorporadas a la oferta de los próximos años.
“Para dar un salto cuántico, realmente es necesario ir 5 o 7 años al futuro. Ver esas cosas que dices 'oye, esto no está todavía en un banco, no se utiliza en el negocio financiero, pero podría ser si lo conecto de alguna forma: una disrupción'”, dice.
“Es ver qué capacidad tecnológica necesitamos y qué capacidades técnicas en personas necesitamos”, anota.
Sin casos de uso para blockchain y Web3 (aún)
El Bci Labs también tiene una división que recibe propuestas de funcionalidades o modelos de negocio de fintechs y startups que puedan ser escaladas en los productos del banco, que es el más grande del país.
Para certificar la viabilidad de las innovaciones que llegan al programa Bci Startups, el laboratorio activa pruebas masivas controladas. Recientemente, vincularon a una fintech con una solución de factoraje digital como un proveedor de servicio.
“Hay dolores dentro del banco y es mucho más fácil solucionarlas con una pieza o con una solución que ya esté construida. Y eso le permite el banco acelerar su propuesta de valor sin comerse la curva de desarrollo”, dice el entrevistado.
Para muchos en la industria, el blockchain representa la próxima frontera del servicio financiero. Y aunque ciertamente la tokenización de la economía gana tracción, con experimentos como el del real digital en Brasil, el director de Bci Labs reconoce que el reto de uso para la banca es encontrar modelos que sean realmente rentables.
“Las tecnologías están validadas, son maduras. Ahora hay que encontrar casos de uso donde renten realmente estas tecnologías y donde cumplan. Porque generalmente son tecnologías que están diseñadas en el éter”, advierte el ejecutivo.
Agrega que en la mayoría de los casos son tendencias que funcionan bien en un laboratorio, pero llevadas al mundo real aún faltan tramos en el flujo de ejecución, lo que impide aplicarlas a la compra de un inmueble, por ejemplo.
“Eso es lo que nos pasa a nosotros y a todos los bancos. Cuando tratamos de buscar casos, fallan porque hay ciertas partes del journey, del viaje del usuario, que no están en blockchain”, dice. “Entonces, ¿estamos explorando blockchain o web3? Sí, pero siempre estamos viendo cosas parciales. No hay un gran caso de la realidad”, concluye.
