Esta semana, Binance puso en marcha a Medá en México, una fintech regulada que le permitirá agilizar depósitos y retiros en pesos dentro de su ecosistema. La plataforma de criptos aseguró que invertirá US$ 53 millones en la nueva marca.
“No es algo revolucionario, no irrumpe cambiando nada, es un crecimiento lógico. Le da mucha relevancia y alcance a Binance en México, […] así que necesitaba robustecer sus licencias, controles y facilitar el acceso directo, eliminando terceros, a su ecosistema”, explica a iupana Andrés Carriedo, fundador de Design Banking, una empresa de asesoría de innovación en el sector financiero.
La estrategia de Binance busca facilitar los cambios cripto – pesos en su plataforma, un camino recorrido por otras empresas de la región, como Lemon Cash en sus operaciones en Perú y Argentina.
Asimismo, la jugada permite a Binance no depender de terceros y contar con una empresa licenciada dentro del grupo, lo que les permite ganar reputación y seguridad en el mercado mexicano. Además, Binance tendrá un canal propio para procesar operaciones, lo que se traduce en reducción de costos y mejora la experiencia de usuario.
El anuncio se da en un momento donde el regulador mexicano vigila de cerca a las instituciones tras los escándalos recientes de lavado de dinero, además cambió recientemente su liderazgo.
El hecho de que Medá esté regulada es un reto y una ventaja competitiva. Implica mayores costos de cumplimiento y exigencias operativas y también la diferencia de plataformas cripto que no tienen un brazo regulado.
“Si Medá y Binance están haciendo esfuerzos en la línea correcta para el cumplimiento y la prevención, es una oportunidad para darle más relevancia y alcance a la entidad en Mexico y la región”, concluye Carriedo.