En los últimos meses, varias fintechs de la región han comenzado a invertir en el mercado peruano, viendo en el avance de la interoperabilidad de pagos una oportunidad para expandir sus negocios.
Es un reflejo de que Perú, un mercado donde los bancos dominan el movimiento financiero, está avanzado en cambios institucionales y regulatorios que permitan diversificar la competencia y motivar la creación de propuestas para sectores aún desatendidos, como la economía informal o los micronegocios.
Las reglas de la interoperabilidad de pagos, impulsada por el Banco Central de Reservas de Perú (BCRP), permiten a algunas fintechs locales (con licencias de Empresas Emisoras de Dinero Electrónico – EEDES) integrarse al sistema inmediato, a la vez, otorgándoles capacidad de facilitar la entrada de otras marcas regionales al esquema –y al país.
Un panorama donde está pendiente el despunte de alguna alternativa digital que logre alcanzar masivamente los espacios donde los gigantes Yape, de Credicorp, o Plin, del consorcio Interbank, Scotiabank y BBVA, no han calado.
“Las EEDEs y wallets están bien posicionadas para aprovechar a los segmentos no bancarizados y competir creando modelos más centrados en la experiencia del usuario”, opina Estephania Ramírez, especialista en pagos y que ha trabajado anteriormente como directora en empresas como PayU y Bamboo.
“Las fintechs actúan como integradores tecnológicos y diseñadores de soluciones que facilitan la interoperabilidad y agregan valor a través de propuestas más puntuales. Desde mi punto de vista, los ganadores a nivel corporativo serán las plataformas que consigan masificación y mantengan una experiencia impecable”, complementa en conversación con iupana.
Los jugadores locales en la delantera
En una muestra de esta seguidilla de lanzamientos, tres de las cuatro EEDES licenciadas en Perú están ofreciendo sus servicios de proveedores de Fintech as a Service (FaaS) para que otras billeteras se unan a la plataforma del BCR o lo están planeando para el futuro cercano.
Así, la EEDE Tarjetas Peruanas lanzó hace pocas semanas su solución FaaS con el nombre Ligo Payments, algo que ya habían adelantado a iupana en julio. La empresa también tiene una billetera digital llamada Ligo, la cual integraron a Plin con el fin de hacer pagos inmediatos, un factor decisivo para los consumidores peruanos.
En esta misma búsqueda de negocios y ganar usuarios, la EEDE local GMoney también lanzó Panda recientemente: su wallet para personas no bancarizadas y ofreciendo el envío de remesas a 11 países, repartidos entre Latinoamérica y Europa.
Según voceros de la empresa, en Perú hay un gran segmento no bancarizado al cual quieren alcanzar pese a que la monetización es lenta.
Además, Jet Cash, otra EEDE menos conocida, está desarrollando su solución empresarial, aunque dice que antes se enfocará en fortalecer su billetera especializada en remesas, lo que le permite contar con un ingreso adicional por servicios, a diferencia de otros jugadores que dependen de las transferencias gratuitas.
Fintechs extranjeras se fijan en Perú
Probablemente este año han entrado más fintechs extranjeras a tentar las aguas peruanas que en los últimos cinco años.
Por ejemplo, la argentina Lemon Cash quiere colocarse en el medio de los pagos con moneda fiduciaria y criptomonedas. Para lo primero, se ha asociado con la EEDE GMoney quien le provee los rieles de interoperabilidad.
La semana pasada, la marca aseguró que en solo tres meses de lanzamiento alcanzó los 150.000 usuarios en Perú.
Mientras, la estrategia de Bnka va por otro lado. La fintech española-argentina quiere aprovechar la interoperabilidad para ofrecer facilidad en pagos para su segmento de clientes: latinos migrantes que están en Europa.
La billetera provee una cuenta europea y busca que sus usuarios puedan enviar dinero directamente a otros peruanos a través de los rieles de pagos interoperables y con una solución multimoneda. Su lanzamiento está previsto para la semana del 25 de noviembre.
Asimismo, fuentes confirman que la chilena Global66 también está próxima a montarse en la interoperabilidad de pagos en Perú, con una propuesta de billetera global con cuentas europeas y en Estados Unidos.
Otra marca regional que está apostando por Perú es Prex, incluso desde antes que se abra el caño de las transferencias inmediatas. La billetera uruguaya se integró hace pocas semanas al sistema y complementó su oferta que ya incluía la entrega de microcréditos en base a un modelo de riesgo propio, un producto que deja más márgenes que las comisiones por pagos.
Desde PrexPe, la marca para el mercado peruano, aseguran a iupana que se sumaron a la interoperabilidad con el fin de ganar masa de usuarios y ofrecer productos personalizados con la data.
Creando data para diferenciarse
Y es que ese escenario la clave está en que, en medio de este inicio de aguas movidas, las nuevas fintechs (locales o importadas) logren diferenciarse con una oferta de valor que capte la atención de los usuarios.
Todas estas soluciones empezarán a generar y colectar datos alternativos de comportamiento, valiosos si ayudan a desarrollar productos que respondan a los usuarios.
“Los datos transaccionales deben considerarse un activo valioso. Fintechs y bancos pueden usar estos datos para desarrollar herramientas de scoring crediticio, análisis predictivo y segmentación de clientes”, recalca Ramírez.
“Se pueden crear soluciones para la economía informal, como herramientas digitales para pequeños negocios y servicios financieros adaptados a este segmento, que ayuden a superar la desconfianza. Además, la interoperabilidad nacional puede servir como base para expandir soluciones a pagos transfronterizos”, dice la especialista.