Incluir financieramente a más personas de América Latina resulta en una inversión considerable. Sin embargo, al masificar el uso de canales virtuales –empezando por los pagos– se genera la chispa para poner a andar diversas estrategias de negocio más rentables.
Los altos costos tecnológicos de soporte y desarrollo de medios digitales, unido a la preferencia de los usuarios por soluciones sin comisiones, ha disminuido los márgenes de ganancia de los habilitadores de pagos digitales, como billeteras electrónicas o neobancos. Pero la vertical continúa siendo la puerta de entrada para que las empresas incorporen a sus filas a más clientes y ganen presencia frente a competidores.
¿Cómo construir modelos de negocio a raíz de la masificación de los pagos digitales? Ejecutivos de PayPal, Yape y Mercado Pago contaron sus experiencias y estrategias en el webinar “Pagos digitales: Construyendo casos de éxito basados en la inclusión financiera” organizado por iupana.
“La habilidad de hacer pagos tiene que ser un costo que asumes como empresa. Pero es una inversión también, porque la plataforma de pagos es lo que te ofrece la oportunidad de generar escala y generar masa. Y ahí es donde puedes ofrecer productos de valor agregado que pueden generar ingresos”, explicó Marcelo Alzamora, líder de inclusión financiera de Yape, la billetera digital de Credicorp, la más usada en Perú.
La billetera, nacida en 2016, inició como una aplicación para hacer transferencias peer to peer (P2P), y ha evolucionado de tal modo que hoy distribuye otra variedad de productos y genera ventas cruzadas. Sus usuarios pueden solicitar microcréditos, hacer inversiones y acceder a promociones. Alzamora adelantó en la conversación que próximamente se le añadirán productos de recepción de remesas y cambio de divisas.
Impulsando la masificación de pagos digitales
Para ganar a un cliente es fundamental la experiencia y la seguridad. Los voceros coincidieron en que el reto es generar un ecosistema de confianza para empresas y consumidores.
«Todo lo que pasa después de la confirmación del pago es lo que termina convenciendo tanto al vendedor, como al comprador a seguir realizando sus pagos de manera digital”, advirtió Marco Toschi, gerente de pagos digitales de Mercado Pago.
El ejecutivo hizo énfasis en que las plataformas deben disminuir los riesgos de fraude y solucionar problemas de contracargos para no generar fricciones que desincentiven el uso de canales digitales. Anotó que es uno de los valores diferenciales en los que hace énfasis Mercado Libre.
No obstante, aún persisten algunos retos por superar, para aumentar los niveles de uso de pagos digitales en la región. Desde PayPal, un pionero de las transferencias inmediatas, anotaron que la amplia informalidad laboral en América Latina promueve los pagos en efectivo. También que persisten temores entre los pequeños empresarios y dueños de negocios por los cobros de comisiones e impuestos; lo que mantiene a un significativo grupo fuera del ecosistema virtual.
“Otra de las cosas que ha afectado el uso de los pagos digitales dentro de las empresas es que existen pocos incentivos para estar en la formalidad para las empresas”, opinó Mayrén Martínez, líder de desarrollo de mercados para Latam de PayPal.
Añadió que las exigencias de contabilidad e incluso los trámites burocráticos resultan costosos para las micro y pequeñas empresas.
“Son costosos y requieren que estas empresas, que tienen pocos recursos, contraten a un contador, a equipos para poder hacer frente a todos estos requisitos que exige la ley y, por ende, para evitar la carga administrativa que esto genera, pues prefieren seguir en la informalidad”, sentenció.