La digitalización del dinero está permitiendo que los latinoamericanos amplíen su capacidad de compra y consumo con mayor frecuencia, a través del uso de métodos de pagos alternativos como tarjetas de crédito o buy now, pay later. Sin embargo, el efectivo sigue dando lecciones útiles a los proveedores de pagos electrónicos.
Aunque los métodos digitales de transacción están creciendo en adopción, el dinero continúa siendo protagonista en los mercados en América Latina, por lo que el negocio de la adquirencia tiene el reto de replicar su conveniencia.
Esta idea fue expuesta en el webinar “Soluciones de pago listas: cómo atraer clientes con adquirencia de última generación” organizado por iupana y que contó con voceras de Getnet México, ualá bis y BPC Technologies.
“Pagar con efectivo es fácil. Tenemos que replicar esa experiencia en el online, si queremos que la gente adopte nuestros métodos de cobro”, dijo Maia Eliscovich, vicepresidenta de ualá bis, el producto de adquirencia del unicornio argentino.
Elisconvich resalta un hecho que es común para quienes están en el negocio de proveer medios de pagos en los comercios: los pequeños emprendedores de la región prefieren el efectivo porque disponen del dinero de inmediato, además que prescinden de intermediarios, una prestación que las transferencias Cuenta a Cuenta (A2A) han logrado equiparar. Aproximarse a esta experiencia es el objetivo de las empresas adquirentes, según la ejecutiva, quien resaltó que ualá bis hace abonos inmediatos a sus usuarios.
Las transferencias A2A, aquellas que usan plataformas como Pix en Brasil, SPEI en México o Transferencias 3.0 en Argentina, están ganando espacio y han logrado arrebatar un pequeño porcentaje de uso a los pagos con tarjeta de crédito en el e-commerce de la región, según concluye un reciente estudio de Ebanx, una paytech global nacida en Brasil.
Más que un POS
Ante esto, los adquirentes reconocieron que deben robustecer su propuesta de cara a los comercios y generar mayores ventajas de uso.
“A la tienda de la esquina no le basta con tener una mPOS (terminal de punta de venta móvil), necesitas darle otros tipos de merchant services. Como que las personas que van a la tienda puedan hacer una recarga telefónica o pagar servicios”, resaltó Tamara Moreno, líder de estrategia e innovación de Getnet México, la plataforma de pagos de Santander.
“Que no sea ese punto de venta tradicional, sino que tenga otras opciones que generen flujos de gente y, con estos flujos, se produzcan ingresos adicionales”, continuó.
De este modo, el tendero reduce su percepción de que la empresa proveedora del POS es alguien que únicamente cobra comisiones, sino que lo ve como un aliado que permite a sus clientes realizar más operaciones en su bodega.
Y de cara al usuario final que usa medios digitales para sus compras, Eliscovich agrega otro beneficio que la tecnología está permitiendo es que paguen con dinero que no necesariamente tienen en la cuenta, usando herramientas como BNPL o créditos al consumo aprobados en apps, pues “no pago con lo que tengo hoy, sino que difiero ese pago en el tiempo”.
Masificar pagos digitales
Con esta mirada, Mercado Pago ingresó al mercado de recargas a la tarjeta de Movilidad Integrada (Tarjeta MI) que se usa para todo el sistema de transporte público de la Ciudad de México. En mayo de 2022 reconocieron que, aunque las recargas no disponían de un margen amplio de ganancia, sí ayudaba a la billetera en la retención de usuarios, a la vez que genera tráfico en las tiendas pequeñas donde se hacen recargas a través de sus POS.
En este sentido, en Ecuador, la proveedora de tecnología BPC Technologies, está implementando un sistema de pagos digitales para uso específico de transporte.
“Cuando hablamos de adquirencia, no es solamente una compra en una tienda tradicional o en una compra diferida a través de una plataforma de e-commerce. Podemos llevarla a otros tipos de experiencias como el transporte, que es totalmente masivo y que, al final, lo que se busca es generar un volumen mucho mayor para poder hacerlo rentable”, anotó Mariflor Alice, directora regional de producto y servicios de procesamiento de BPC.