El BCi se incorpora a la ola tecnológica regional al presentar su plataforma abierta de APIs, una iniciativa con la que esperan fortalecer su estrategia digital y generar nuevos productos con aliados fintech que los coloquen en momentos cruciales de la vida de sus clientes, como la compra de propiedades y autos.
La incorporación de API Market representa el primer acercamiento de la industria bancaria chilena al aprovechamiento de la API Economy, una tendencia mundial a la que los bancos latinoamericanos se acercan cada vez más para brindarle agilidad a sus operaciones, como es el caso de los mexicanos Banco Azteca, Citibanamex y BBVA; estos últimos con plataformas también para soporte global.
La entidad, una de las de mayor tamaño en su país, espera que su último movimiento cree una fuente de alianzas que propicie nuevos modelos de negocio, mejores experiencias para el usuario, y que, a la larga, les permita capitalizar la creciente demanda de servicios financieros en el mundo virtual.
Las plataformas inmobiliarias son un ejemplo de ello, sostiene Pedro Zegers, product owner senior en Banco de Crédito e Inversiones.
“En el tema hipotecario, nos dimos cuenta que los clientes cuando quieren comprarse una propiedad inician su journey no en el banco, sino en una inmobiliaria o en un marketplace para buscar esas propiedades. El hecho de llevar el simulador hipotecario a esos contextos facilita mucho y mejora la experiencia”, dijo en entrevista con iupana.
Alojar las prestaciones del banco en este tipo de plataformas permite al cliente simular los montos y plazos de su hipoteca, facilitando ese viaje de usuario. Este caso de estudio, que ya está productivo, es apenas una de las soluciones que se potenciarán a partir de las conexiones con el entorno, adelanta el gerente.
De hecho, Zegers agrega que están desarrollando productos para distintas necesidades y verticales.
“Estamos potenciando una API de crédito de consumo para personas; es decir, que pueda simular un crédito para ver si la persona puede o no adquirir un financiamiento fuera del contexto del banco. Por ejemplo, cuando esté comprando un auto, o algún producto de alto valor que requiera de financiamiento”, explica.
De cara hacia el usuario, la principal ventaja tangible se resume en una menor cantidad de pasos para completar una acción, además de disponer de API Product Identity, una funcionalidad que permite a los clientes del banco compartir datos de su perfil personal (nombre, dirección, correo electrónico, etc.) en la aplicación o plataforma autorizada de alguno de los socios del banco.
“El principal beneficio para los usuarios es que tendrán flujos con menos fricciones, el ahorro de tiempo, y estar como banco presente en el momento que sabemos que el cliente nos necesita”, agrega el ejecutivo.
Banca abierta, y otros retos
Todas las colaboraciones que se pongan en marcha a través del API Market fortalecerán la estrategia de innovación del banco, un objetivo esencial para la entidad. Sin embargo, Zegers reconoce que en esta primera etapa tienen el foco mucho más colocado en lograr un buen posicionamiento del market.
Las fintechs y desarrolladores interesados en potenciar sus productos con el set de APIs que el banco está rodando, pueden acceder a ellas a través de su portal.
Previo al cierre de 2020, el Ministerio de Hacienda de Chile anunció que empezaría a trabajar en un marco regulatorio de banca abierta con el fin de promover la competencia de las instituciones financieras en el país. Sin embargo, desde el Banco de Crédito e Inversiones consideran que la normativa “va a tomar su tiempo”, y que sus APIs –por lo pronto-, solo están disponibles para conectarse con el ecosistema digital.
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Aunque la oportunidad más concreta que el banco apunta con el lanzamiento del API Market es ofrecer una experiencia financiera sin fricciones, se cuestiona si esta también será una puerta abierta al open banking, tan esperado por el mercado.
Más allá de la regulación, para el representante del BCi el reto más grande continúa siendo el entender las necesidades de los clientes, y crear soluciones relevantes para ellos. También demostrar –incluso dentro de la misma institución- que los ambientes colaborativos tecnológicos pueden aportar valor a los productos bancarios.
Esta primera etapa de lanzamiento corresponde a un periodo para perfeccionar la oferta digital que arrancaron hace cuatro años, con el lanzamiento de BCi Labs, el laboratorio de innovación del banco.
“Poner al cliente al centro de cualquier desarrollo y ver las oportunidades que hay vía APIs ha sido el principal reto no tecnológico de este proyecto”.
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